Fran Villalba vive una situación incómoda para todos 

VALENCIA. El canterano valencianista Fran Villalba, anda olvidado en el filial de Curro Torres y sin apenas protagonismo en el Grupo III de la Segunda División B del fútbol español. Sobre el centrocampista cuelga el cartel de 'estrella emergente' que le colgó Nuno con el apoyo del club durante el verano de 2015. Ahora, sólo un año y medio después el jugador vive sumido en una depresión futbolística y muy lejos del camino que le debería llegar a triunfar y asentarse en el primer equipo blanquinegro. El jugador está pagando las excesivas prisas que todas las partes tuvieron para ascenderle desde el juvenil hasta el primer equipo y ahora mismo la situación es tensa tanto para el jugador como para el club. 

Pese a su mínima participación en el Mestalla, apenas ha jugado 108 minutos de los 720 de competición, firmando un gol y no habiendo sido titular en ninguna jornada, Villalba sigue siendo un jugador muy seguido por los grandes clubes de Europa. El FC Barcelona, entidad en la que Fran ya jugó en edad de cadete, lleva varios meses tanteando al entorno del jugador debido a la excelente relación del director deportivo azulgrana y de la agencia de representación de Fran, 'Interstar Deporte'. Robert Fernández trabajó junto los agentes de Villalba hasta antes de embarcarse en la aventura barcelonista. Sin duda, el Barcelona es el club mejor colocado si Villalba decidiera marcharse del Valencia CF. 

De hecho, hay quien afirma que el acuerdo entre Villalba y el Barcelona es total y que los azulgrana pagarán la cláusula de rescisión, de cuatro millones, del jugador en enero. Sin embargo, esa rumor lleva muchas semanas rondando el entorno valencianista igual que las ofertas de Premier que al parecer le llegan al jugador. La realidad es que el futbolista es miembro de la plantilla del Valencia Mestalla y que su participación es prácticamente testimonial en un equipo que hasta este domingo era el líder de la categoría. Ese rol no es el esperado por el jugador, que evidentemente no está nada contento con su situación y como es lógico escucha las posibles alternativas de futuro.

El Valencia CF por su parte no se mueve ante los rumores de salida del jugador. Asumen el error de haberle dado tanto protagonismo en el primer equipo, pero entienden que ahora mismo no está rindiendo al nivel que debería ni siquiera para ser titular en el filial y por eso no juega en Segunda B. Pese a eso, el club intentar renovar al futbolista y llevar el compromiso entre las partes hasta más allá de lo firmado, junio de 2018. Eso sí, de momento las negociaciones son en balde. 

Pese a que nadie quiere hablar del tema Villalba, la realidad es que existe una calma tensa entre todas las partes. Nadie está cómodo. Ni el club, ni el jugador. Para el club no es sencillo manejar la situación de un futbolista que ha debutado con el primer equipo y ha dejado un buen sabor de boca pero que no está evolucionando en el césped y según los técnicos no está dando el nivel para jugar en el filial, y para el jugador no es entendible que después de haber debutado con el primer equipo ahora no tenga cabida ni siquiera en los planes del segundo equipo. 

Fran Villalba pasó a ser conocido por la mayoría del valencianismo en el verano de 2015, cuando Nuno Espírito Santo, decidió incluirlo con apenas 16 años en la pretemporada del primer equipo. Villalba pasó todos los cortes ese verano e incluso fue presentado con el primer equipo en Mestalla. El portugués fue su mentor como premio a su pretemporada le prometió minutos con el primer equipo en las primeras fases de la Copa del Rey. Pese a que Nuno fue destituido antes de esas primeras rondas el sustituto, Gary Neville, también se mostró encantado con las prestaciones del canterano y no sólo le dio participación en las primeras rondas si no que convirtió a Villalba en el máximo exponente de Paterna en el primer equipo haciéndole debutar incluso en Liga ante el Villarreal en el Madrigal. 

El 10 de febrero Villalba jugó sus últimos minutos con el primer equipo en la vuelta de la semifinal de la Copa del Rey ante el Barcelona, en un partido de trámite tras la goleada azulgrana en la ida. Fran jugó 80 minutos y cuajó una buena actuación pero desapareció de los planes de Neville y pasó a un filial que había encontrado su mejor once y que vivía sus mejores momentos de la temporada y Curro Torres no le encontró sitio hasta el punto de que el centrocampista debió bajar al juvenil para encontrar minutos. 

Este verano parecía que la cosa cambiaría y que Fran sería importante para el filial. En pretemporada, pese a que no lo reconoció, el jugador se llevó un golpe duro al ver como no estaba entre los muchos canteranos que hacían la pretemporada con el primer equipo y pese a que trató de ganarse un puesto en el Mestalleta no lo ha conseguido. Este domingo no entró en la lista de convocados por lesión, pero de siete jornadas en las que ha estado disponible en ninguna ha sido titular.

El club asegura que cuenta con él pero no la realidad es que no juega. El jugador ha perdido la confianza y estudia ofertas, eso sí la renovación con el club de Mestalla parece haber pasado a un segundo plano.